¿Estás arrepentidísimo de todo lo que comiste durante las posadas, la noche de Navidad y el Año Viejo? ¿Rompiste la silla oficinil con el sobrepeso que volvió junto contigo al trabajo? ¿Entraste tanto en crisis que estás a punto de iniciar la dieta de la manzana? ¿Tu primer propósito de año nuevo fue bajar de peso? Tranquilo. No hiperventiles. Entendemos perfectamente tu estrés, por eso queremos compartir contigo estos tips que sin duda te ayudarán a despedirte de la grasita del 2010.
- Corre. No, no hablamos de que ya se te hizo tarde y debes meterle velocidad. Hablamos en serio: lánzate a algún parque cercano con tus tenis más cómodos y date unas vueltas. Sábete que las personas que corren por al menos cuatro horas a la semana, derriten más calorías que los no-corredores, según Yale. Si sólo caminas: hazlo con palos de esquiar y quemarás más calorías.
- Inscríbete al GYM, cómprate un aparato para hacer ejercicio o métete a los aeróbicos (o al zumba y demás variaciones). Una vez que estés listo, ejercítate intensamente durante la primera mitad de tu entrenamiento, si lo haces quemarás hasta 23% más grasa que iniciando con un bajo ritmo, según The College of New Jersey. Tampoco olvides entrenar duro y rápido (al hacerlo, de preferencia, escucha canciones movidonas).
- Haz mancuernas lentamente: el entrenamiento en repeticiones lentas incrementa tu fuerza en 50%. También puedes cargar kilos mientras caminas o ponerle más peso a las pesas. Tip: las rusas ayudan a construir músculo (entrenar con ellas durante 20 minutos quema tantas calorías como correr a un paso de 9.6 kilómetros por hora). Después de las pesas: ¡muévete!, si lo haces puedes quemar más grasa que haciendo sólo cardio.
- Haz ejercicios cardiovasculares de alta intensidad y altérnalos con otros de baja. Si te avientas 80 minutos de entrenamiento a la semana no ganarás grasa en el abdomen después de haber perdido peso.
Hacer ejercicios de cardio después de las pesas te ayuda a quemar más grasa.
- Inhala esencias de fresa y palomitas con mantequilla para quemar calorías, según Fundación del Tratamiento del Gusto y el Olfato en Chicago.
- Patea o boxea en Wii.
- Toma té verde o café para impulsar tu metabolismo. Come proteína para quemar grasas, come dos huevos en el desayuno, ingiere grasa monoinsaturada (como el aceite de oliva y el aguacate), desayuna alimentos de bajo índice glucémico (como muesli o duraznos), satisface tus antojos sanos (almendras, cerezas, yogurt, toronja, granos integrales) y éntrale a la comida condimentada para reducir la grasa.
- Come y siempre mántente arriba de las 1,200 calorías. Las mujeres que dejan de comer durante largos periodos son más propensas a tener porcentajes altos de grasa que las mujeres que comen regularmente. Si estás a dieta, no reduzcas más de 250 calorías por día.
- Toma una comida ligera para que tu cuerpo pueda digerirla y, por favor, deja de comer hasta echar el botonazo, ya que tu cuerpo sólo puede manejar cierta cantidad de comida a la vez. Éntrale a la vitamina C y D, una quema la grasa, la otra te ayuda a perderla, y al aceite de pescado.
- Evita beber alcohol (puede desacelerar tu metabolismo en 73%), tomar jugo (¡aguas con las calorías!), y trabajar en horas no tradicionales (reduce los niveles de hormonas que disparan la saciedad e incrementan la glucosa en la sangre y los niveles de insulina).
- No veas tanta TV, visualízate entrenando un músculo específico, ejercítate un tiempito después de despertar y duerme mucho, 8 horas y media de sueño te ayudará a perder grasa.
¡Deja de comer hasta el hartazgo!
Camina con palos de esquiar y quemarás calorías.
El boxeo en Wii quema el doble de las calorías que otros juegos de Wii, como el golf, según Health.com.
El cuerpo promedio de una persona pasa al modo de hambre si come menos de 1,200 calorías por día. Eso produce estrés, y el estrés produce grasa en el abdomen.
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