Los desarrolladores de software y los fabricantes de equipos saben hoy, mejor que nunca, que no basta con tener la mejor tecnología si no se brinda la opción de que terceros amplíen las capacidades y la versatilidad de sus creaciones.
Así, por ejemplo, el iPhone no habría logrado impactar la industria móvil si no hubiera contado con miles de desarrolladores que, con sus aplicaciones, lo convirtieron en un dispositivo apto para toda clase de tareas (la tienda App Store supera las 320.000 aplicaciones y los 10.000 millones de descargas), y los demás sistemas operativos móviles ya montaron sus tiendas para seguir esos pasos).
Juegos como Rock Band no engancharían a sus usuarios si no fuera posible comprar accesorios (instrumentos) nuevos o agregar nuevas canciones. Facebook no tendría 600 millones de usuarios si su fundador, Mark Zuckerberg, no hubiera abierto su red social a los desarrolladores de aplicaciones. Y así, podrían enumerarse muchos ejemplos, pero uno de los que no pueden faltar es el de los navegadores.
En la primera gran ‘guerra de los browsers’, Netscape Navigator e Internet Explorer batallaban en muchos frentes –velocidad, compatibilidad, soporte a estándares, facilidad de uso y un largo etcétera–, pero prácticamente en todos ellos sus creadores, Netscape y Microsoft, tenían todo el control de las armas con las que pelearían.
Con la llegada de Firefox, la Fundación Mozilla creó un nuevo campo de batalla. El navegador del panda rojo –ningún zorro de fuego–, desde antes de su versión 1.0 surgida en 2004, empezó a ofrecer algo que era nuevo y que capturó el interés de los usuarios más avanzados de la Web, que hasta entonces sentían que los navegadores los limitaban: las extensiones.
Desde entonces, esa minoría de usuarios –y fanáticos– de Firefox empezó a hablar de AdBlock, Tab Mix, FoxyTunes, FireFTP y muchas más extensiones, algunas de las cuales desaparecieron porque fueron tan útiles, que tiempo después fueron incorporadas en forma predeterminada por este y otros navegadores.
En la Zona de Pruebas de septiembre de 2009 en la revista impresa, titulada ‘Casi fiel a Firefox’, escribí que extensiones como Tab Mix Plus, Google Toolbar y Xmarks eran la única razón de ser por la cual Firefox seguía siendo mi navegador favorito. Un año después, Xmarks ya existe para casi todos los navegadores –y la sincronización de favoritos y pestañas ya es una función incluida en varios de ellos–; Google Toolbar sigue siendo exclusiva para Firefox e Internet Explorer, pero las funciones de la barra de Google están a la mano con otras extensiones en algunos rivales de Firefox.
Tab Mix Plus, que da una versatilidad única en la administración de pestañas, sigue siendo exclusivo de Firefox. Aunque Google Chrome, Safari, Internet Explorer y Opera incorporan opciones de configuración para las pestañas, y existen extensiones que tratan de ampliar las posibilidades, todavía nada iguala a la clásica extensión para el navegador de Mozilla (algo imprescindible para personas obsesivas con las pestañas, como es mi caso, que abusan hasta superar las 60).
En el terreno de las extensiones, hay malas noticias para Firefox: estas (también llamadas agregados o complementos) ya no son su gran ventaja competitiva, pues los otros navegadores ya le empiezan a pisar los talones con una creciente oferta.
Por ello, y dado que mi fidelidad hacia Firefox es cada vez menor y ahora prefiero el ‘eclecticismo en línea’, a continuación comparto mis extensiones favoritas en los navegadores que uso a diario o varias veces a la semana. Para quienes no han probado las extensiones en su navegador predilecto, estas pueden ser un buen primer paso, y las encontrarán el alguno de los menús de herramientas u opciones. Pero después de probarlas, podrán visitar los directorios de cada uno e instalar las que sean más útiles o ajustadas a sus necesidades..
Extensiones ‘omnipresentes’.
Algunas han sido tan exitosas, que sus desarrolladores o terceros decidieron crear versiones para otros navegadores cuando estos las permitieron. Estas son algunas recomendadas que están disponibles para Firefox, Chrome y Safari:AdBlock: Dirigida a los usuarios que quieren que los sitios web visitados estén limpios de publicidad intrusiva.
Feedly: Brinda una forma rápida, agradable y muy práctica para leer y compartir contenidos de los sitios favoritos y otros servicios web. Permite configurar una especie de ‘revista en línea personalizada con fuentes provenientes del lector de RSS Google Reader y también de Twitter, Facebook, YouTube, Amazon y Delicious.
Xmarks: Hasta hace sólo unos 9 meses, Xmarks (antes Foxmarks) era la única alternativa posible para sincronizar los favoritos en varios computadores, y funcionaba sólo en Firefox. Ahora también está en Safari, Chrome e Internet Explorer. Sigue siendo una gran opción, aunque ahora varios navegadores incluyen la sincronización de favoritos de forma predeterminada.
Shareaholic: Para los adictos a compartir los contenidos que les gustan mientras navegan, nada mejor que esta extensión que con un par de clics permite enviar una página por correo y a redes sociales como Facebook y Twitter, a lectores de RSS como Google Reader, a aplicaciones personales como Evernote y Read It Later. En total, soporta más de cien servicios, es muy fácil de configurar y evita que las barras de los navegadores se llenen de botones de varios servicios. Además de funcionar en los tres navegadores mencionados, también lo hace en Internet Explorer 8.
Sólo para Firefox (hay más de 11.000 extensiones para las versiones actuales, y más de 20.000 en total).
Tab Mix Plus: Como dije, por la versatilidad que brinda a la gestión de pestañas, es tal vez la única razón de ser por la que un usuario de Firefox no cambiaría su navegador por nada.
Google Toolbar: La barra de Google, exclusiva para este navegador, no sólo brinda acceso a muchos de los servicios de la compañía, sino que permite configurar botones para muchos otros sitios y servicios.
Video DownloadHelper: Es la más madura de las muchas extensiones que permiten descargar videos de YouTube al computador y convertirlos a otros formatos.
Greasemonkey: Es un clásico de los usuarios avanzados de Firefox, que permite instalar agregados muy especializados que el navegador no soporta por sí mismo. Uno de estos agregados es Better Gmail, que brinda numerosas opciones para el servicio de correo de Google.
Google Chrome (hay unas 10.000 extensiones).
Awesome Screenshot: Permite hacer capturas de pantalla de las páginas web visitadas, hacer anotaciones y compartir las capturas con un clic. Las imágenes capturadas se pueden editar. Lo mejor: con ella no sólo se pueden hacer capturas de lo que se ve en pantalla, sino de una página entera, así sea muy extensa.Facebook Photo Zoom: Permite, con sólo pasar el cursor sobre una fotografía en Facebook, verla a mayor tamaño. Para los fanáticos de curiosear en los álbumes de sus contactos, es un ahorrador de tiempo grandioso.
Google Shortcuts: Todavía muchos usuarios de Chrome se quejan de que Google no tenga una barra propia como la tiene para Firefox. Sin embargo, esta extensión pone a un par de clics más de 148 servicios distintos de Google.
Chrome TV: Un par de clics basta para ver televisión en línea, tanto local como mundial. De Colombia, por ejemplo, ofrece la señal de los canales regionales y del canal de noticias NTN 24.
Safari (hay cerca de 300).
Twitter for Safari: La extensión oficial de Twitter presenta ‘trending topics’ en tiempo real e información sobre cada página web en la que se navega, con tweets y usuarios relacionados. También permite ‘twittear’ sobre una página y publicar el enlace automáticamente.AutoPagerize: Quienes odian dar clics para pasar a la siguiente página en los resultados de búsqueda, en blogs y otros sitios que presentan contenidos en secuencia se sentirán felices de que esta extensión cargue automáticamente varias páginas a la vez y baste con llegar hasta el final de una para pasar a la siguiente.
ClickToFlash: Apple ‘odia’ Flash: no está en el iPhone, el iPad o el iPod touch. Y muchos usuarios de Apple también lo odian, porque pone lentos los navegadores o incluso los bloquea. Esta extensión funciona como AdBlock, pero no oculta la publicidad sino los contenidos en Flash, que solo se pueden ver si se activan con un clic.
Opera (en solo un mes ya se acerca a las 400).
Link Redirector: Redirecciona cualquier enlace a direcciones arbitrarias mediante filtros (por ejemplo, una imagen que se encontró en Google se puede abrir directamente, o un documento en PDF puede abrirse con Google Docs).Tab Vault: Almacena pestañas para más tarde y evita así que la barra de pestañas se llene. ¿Será la respuesta a los adictos a las pestañas?
¿Y para Internet Explorer, qué?
Todavía la mayoría de usuarios de la Web usa el navegador de Microsoft (un poco más del 50%). Esta es la gran recomendación para este navegador: IE7pro, la ‘extensión de extensiones’ para Internet Explorer 7 y 8.
Es un programa (no se instala desde el navegador como las extensiones) que permite configurar muchas opciones del navegador y agregar nuevas funciones. Entre muchas funciones, gestiona las pestañas, recupera textos en formularios, configura combinaciones de teclas, filtra la publicidad, corrige ortografía, administra descargas y aumenta las opciones de privacidad.
Para Internet Explorer, además, existen numerosas barras, como la Google Toolbar y la de Alexa, que facilitan el acceso a contenidos o servicios específicos de sitios web o empresas.
Vía enter.co
No hay comentarios:
Publicar un comentario